domingo, 19 de diciembre de 2010

Anatomista (parte 2)

Bueno este ya no es un tema demasiado contemporáneo. Pero casi por una cuestión de orgullo personal no quiero dejar de publicarlo. Hasta quizás nos pueda llegar a ayudar en algún futuro.

La 2da parte de Anatomista está compuesta por una serie de conclusiones que fui sacando a lo largo de la Toma de la Facultad de Sociales.

Para retomar el hilo conductor, como mencionábamos en la parte 1, El hecho de no saber en calidad de qué se hacía la toma: con aulas abiertas o cerradas, hacía más latente la necesidad de participar de los procesos de toma de decisión. Yo no había participado de una asamblea de FSoc, pero justo se dio que la de Corrientes y Ángel gallardo estaba cerca de casa.. y me enteré que estaba teniendo curso y fui. Fue la asamblea con mayor cantidad de asistentes durante toda la Toma. Yo estaba en calidad de oyente y observadora (como muchos) pero en algunos momentos era difícil contenerse y no levantar la mano en alguna votación.
Lo que observé en las asamblea fue que:
No tenia temario específico alguno: No se sabía con anticipación qué era lo que se iba a definir, ni el temario, ni los ejes a ser mocionados. La toma ya estaba votada y siendo efectiva pero sin embargo, se seguía debatiendo si sí a la toma o no a la toma, cuando en mi opinión se tendría que estar debatiendo qué hacer luego de tomada la facultad. Como y de qué forma encarar el proceso de negociación con el decanato, cómo formar la comisión propuesta por Perez Ezquivel y las condiciones de diálogo propuestas, etc.. Nada de eso.

No había criterio en las mociones: Las mociones presentadas por desconocida cantidad de oradores iban desde temáticas en defensa de las mejoras edilicias y presupuestarias de la facultad de sociales (cosa que me parecía muy pertinente); pasando por la defensa de la Educación Publica en todos sus niveles, primario, secundario y universitario (para este objetivo tan abarcativo yo hubiera recomendado no sólo la toma de la facultad de sociales y una asamblea en ángel gallardo, sino la alianza con otras facultades, y hasta entidades educativas de alcance nacional). Y no faltaban las mociones en contra del mundo capitalista, el pedido de destitución del Jefe de Gobierno porteño, de la Presidenta de La Nación y el Presidente de USA, hasta pedir por la muerte de Romina Yan (cuac). -No se puede negar que en FSoc tenemos buen sentido del humor hasta altas horas de la madrugada.- 

No se sabía la cantidad de oradores: Este era un tema delicado, porque si bien no se puede censurar la participación de los oradores o de las mociones en la asamblea para que sea lo más democrática posible, debería haber habido algún tipo de pre-selección de los oradores o shortlist, de manera tal que la asamblea no sea infinita y se termine votando en horarios irrisorios.

Había pujas políticas: Los que están acostumbrados a las dinámicas de las asambleas, ya lo saben, pero cuando hay pujas políticas en las asambleas, el factor tiempo y los abucheos toma un rol predominante en las tomas de decisión. En este caso había grupos en contra de la toma con banderas que desde el otro lado del ring las consideraban que condicionaban las votaciones. Los chicos de la UES proponían que se vote mientras que estábamos en un momento climax de la asamblea con mayor cantidad de asistentes, sin esperar a que se terminen todas las mociones, de las cuáles ya se habían escuchando varias campanas distintas. Proponía una voz detrás del micrófono: "¿Quieren que se vote ahora, como quieren los chicos de la UES [buuuuuuuuhhhh] y no esperar a que hablen todos los compañeros?" (que, como mencioné anteriormente no se sabia cuantos eran) -y se votaba a mitad de la asamblea por no votar a mitad de la asamblea. El resultado? Que muchos de los que estaban en contra de la medida se fueran. Pero dos horas más tarde, y con menor cantidad de asistentes, y sin haber terminado de escuchar todas las mociones de los compañeros, se vuelve a preguntar lo mismo, y esta vez sin el padrinazgo de la oposición se avisaba cuantos faltaban. Conclusión? Una votación a las 3 o 4am con menos de la mitad de los asistentes. Poniendo en discusión la representatividad y legitimidad de la asamblea.
Y así siguieron el resto de los días: Las pocas clases que había se transformaban en instancias de debate entre el alumnado a favor y en contra de la toma, la mayoría a favor de los objetivos, pero no del todo seguros de la medida y el proceso de negociación que se iba decidiendo en las asambleas poco multitudinarias. A favor y en contra de la legitimidad de las asambleas. A favor y en contra de la representatividad de las mismas.

¿Cómo terminó la cosa? Ni la toma de Fsoc, ni las aulas abiertas o cerradas, ni el escrache a la Expo Uba tuvieron más ruido que un chasquibum. No hubo mucho diálogo con el decanato porque no se cumplieron las condiciones propuestas por ellos, de dejarlos ingresar al edificio mientras que se llevara a cabo la reunión. Entonces, ya bajo el mito de la perdida del cuatrimestre que nadie se animaría a adjudicarse políticamente, en asamblea se decidió tomar el Ministerio de Educación en Pasaje Pizurno. Esto hizo que aparecieran fuerzas de seguridad, medios de comunicación, un par de golpes y algunos alumnos arrestados. Y se llegó a un acuerdo con el rectorado y el decanato por NNN cantidad de plata y la promesa de empezar a usar el edificio de la sede de Santiago del Estero el próximo cuatrimestre. El alumnado no perdió el cuatrimestre pero sí lo tuvo que recuperar con lo que se pudiera, excluyendo de este plan a los días de duelos por la muerte del ex presidente y por el asesinato de mariano ferreyra. Sin embargo, los alumnos no podrían dar finales de las materias que se cursaron durante ese cuatrimestre. Se ha dicho.

A modo de cierre me gustaría concluir con la mención de un debate que surgió en la clase de Carlos Savransky durante la toma y es que varias de las medidas propuestas y ejecutadas por los "tomistas" provenían por ramas políticamente independientes de la facultad. Los independientes son los que no están ni al frente ni detrás de alguna bandera o ideología, ni partido político. Y eso es algo para destacar ya que, así como no están ni delante ni detrás, tampoco se tiene una guía clara ni un horizonte concreto, ni de objetivos, ni de accionar. Qué es lo que se está reivindicando? cuál es nuestra área de competencia? Y cómo se está haciendo esta reivindicación? si vamos a ir por la paz mundial y el salvataje de la ballena franca austral, y si lo vamos a hacer políticamente (in)correcto o no. Y ese tipo de ejes, usualmente se fijan cuando hay una ideología o un partido detrás. Cuando no se tiene, entonces se apela a la improvisación y a la suerte. Cada uno hará su propio análisis del costo-beneficio y costo por el cambio. Eso sí,  a todos ellos se les deberá agradecer el gran sacrificio altruista de la toma y la manifestación, cuando los estudiantes disfruten del nuevo edificio el año que viene.

Una cosa queda clara y lo comentaba en la primer línea de este post: la toma de la facultad nos deberá servir como experiencia y aprendizaje para las reivindicaciones que se quieran hacer tanto desde la institución cuanto como individuos aislados, y creo que el independentismo a veces está demasiado librado al azar... a veces es preferible comprometerse y jugarse por una camiseta o... ser francamente consciente de la falta de ésta.